Me ejercito cada día en olvidarte
le inyecto cianuro al pensamiento
luego... un áspid me muerde el sentimiento
y así... empiezo a vomitar todo tu recuerdo.
Flagelo cada cavidad de mis poros
y al pincharme la piel que transitaste
es un buen método para arrancarte
de mi ser y de mi corzón... con decoro.
Y si aún así persiste en quedarte
te echaré a latigazos de mi alma,
asesinaré tu recuerdo imborrable
¡y le daré un balaso a tu impronunciable nombre!
De mi producción:
"Ajuste de Cuentas"
No hay comentarios:
Publicar un comentario